En la entrada El metrónomo ya os conté las maravillas y utilidades de darle una oportunidad a este «maldito» aparatejo y he de deciros con ¿orgullo? que después de todo el curso insistiendo no he conseguido que ni uno solo de mis alumnos me haga caso y lo utilice. Como resultado hemos conseguido ¿piezas a la misma velocidad del principio al fin?¿Ritmos estables durante toda la interpretación?. Evidentemente no. Y de paso que yo esté un poco mosqueada, ejem, ejem.
Y es que el metrónomo no solo nos ayuda con el tempo estable y duradero, sino que nos puede ayudar muchísimo a medir correctamente pasajes que, por lo que sea, nos resultan difíciles. Os voy a poner el ejemplo de una chica que vino a clase el otro día. Está tocando una pieza en compás compuesto, sé que la subdivisión binaria es mucho más sencilla que la ternaria, pero eso no es excusa para traerlo durante dos semanas mal medido. La semana pasada ya habíamos hablado del problema rítmico que tenía en la cancioncita en cuestión y el consejo que le di fue que usara el metrónomo. Los metrónomos digitales o las aplicaciones para móvil tienen la posibilidad de marcar las subdivisiones en cada pulso, con lo que el trabajo que yo le pedí y que previamente hicimos en clase fue, poner el metrónomo lento, con la subdivisión de tresillos de corchea y cantar la obra. No hace falta cantarla entera del tirón, pero si cada parte que se practica se canta antes (con el metrónomo) el ritmo y el tempo estarán mucho mejor que si no se hace. Mis chicos pequeñitos tienen claro que primero se canta y después se toca, no sé por qué me cuesta tanto que mis chicos mayores lo hagan también.
Volvamos a la chica de la que os hablaba. Ella, por supuesto, esta semana no ha puesto el metrónomo. No ha cantado la canción. Y no ha hecho el esfuerzo asimilar el ritmo ternario porque era más fácil alargar unas notas más que otras para que la canción le cupiera en el ritmo binario que tan interiorizado tenemos todos. Mi pregunta «¿Has hecho el trabajo con el metrónomo que te recomendé la semana pasada?», no me hace falta su respuesta, claro. Y como resultado tenemos una semana de práctica perdida con lo cerca que estamos de final de curso.
Cómo os digo, hay muchos modelos de metrónomos digitales y aplicaciones que subdividen los pulsos en los golpes que necesitemos para medir bien lo que se esté practicando. Esta es la aplicación de móvil que utilizo en clase, porque además tiene afinador y me parece muy sencilla de utilizar. Se puede descargar aquí.
Ya nadie tiene excusa para no usar el metrónomo. Así que ánimo a todos, que no muerde y solo va a ayudarnos a tocar mejor.
¿Usáis metrónomo?¿Se lo recomendáis a vuestros alumnos?
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