Evitando un abandono

El otro día me quedé muy disgustada porque una de mis niñas favoritas iba a dejar la clase. Ya os he hablado en otros momentos de ella, es una niña jovencita, que viene a clase contenta siempre, nos gastamos bromas y nos divertimos mucho. Entonces no podía entender por qué, de repente, había decidido dejar el violín.

Bueno, esto me lo contó mi jefa, con lo que cuando entré en clase ya estaba preparada para la noticia. Comenzamos la clase como si nada y la niña tocó fenomenal como siempre. Entonces fue cuando su madre me contó que no quería volver (como es tan chiquitilla viene a clase con su madre). La madre estaba tan sorprendida como yo porque es cierto que la niña se ve contenta.

Entonces le pregunté a la niña cómo era que de repente hubiera cambiado de opinión, para descartar que las canciones que estamos usando no le gusten, o que en el cole alguien se haya metido con ella o cualquier agente externo a la propia clase. Yo no soy partidaria de obligar a los chicos a estudiar música, faltaría más, pero sí de investigar cuales son las causas del abandono. Si el motivo es que no le gusta y no quiere tocar, pues listo. Pero si el problema es otro quizá se pueda buscar una solución y que el alumno se quede unos cuantos años más o al menos a terminar el curso.

Indagando descubrimos el problema. La niña no quiere practicar en casa. Como no quiere practicar en casa no quiere venir a clase para no tener que practicar en casa. Seamos realistas, los chicos en casa practican poco, yo considero que por parte de profesores y padres tenemos que animarlos a que lo hagan, pero sin obligación, porque entonces no querrán hacerlo y el aprendizaje de la música no puede estar basado en broncas constantes. La mamá me comentó que algunos días han tenido ya este tipo de problemas y, de verdad, me parecen innecesarios y más con una niña de 6 años, que solo tiene que jugar. Será maravilloso cuando decida jugar a tocar, pero mientras nos adaptaremos.

Al final quedamos en que en casa no se practica salvo para impresionar a abuelitos, amiguitos y demás visitas que haya. Con este sistema ella se siente importante y saldrá de ella tocar en casa aunque sea un poco. Y en clase prepararemos las canciones para que al final de curso el concierto sea precioso.

¿Os pasa esto en casa?¿En clase? ¡¡Contadme más trucos!!

Escríbeme en los comentarios, a micorcheachiquitita@gmail.com o en el formulario de contacto.

Deja un comentario